Hiperborea
Hiper

Después de que la gran guerra entre los Vigilantes y el Ogdru Hem había terminado, muchos de los espíritus menores pudieron asumir su forma. Se convirtieron en la Gente Dorada de Hiperbórea y gobernaron el mundo durante los siguientes 100.000 años. Su imperio era expansivo y tenían ciudades en todo el mundo como Thadrethes, Leto, Hypos, Urrasan y la Atlantida. La ciudad capital de Hiperborea se llamaba Gorinium y el objeto más sagrado de los hiperbóreos se mantuvo en la ciudad. Este objeto era la Mano Derecha de la Condenación, el brazo de Anum, el Vigilante que creó a el Ogdru Jahad y con esa misma mano los aprisionó. La mano se sumergió en ámbar para preservarse y se mantuvo en un cuenco de oro. La mano permaneció aquí hasta los últimos diez mil años del imperio. Este era el tiempo de Thoth, el mejor Rey de Hiperborea. Thoth hizo construir una estatua y colocó la Mano dentro de esta. Thoth tenía un jardín secreto donde guardaba a tres Vigilantes. De estos espíritus pudo aprender todo el funcionamiento del universo y todas las palabras, signos y dispositivos de poder. Tenía este conocimiento escrito en 42 libros, pero solo compartió dos de estos libros con su gente. El resto se los guardó para sí mismo.

La caída de Hyperborea comenzó cuando Heca-Emem-Ra vino a Gorinium y sedujo a Thoth. Mientras dormía ella fue a su jardín y mató a los tres Vigilantes. Ella bebió su sangre y obtuvo su conocimiento. Luego fue al templo de Thoth y vomitó toda la sangre, usándola para escribir todo su conocimiento en las paredes del templo. Luego reunió a toda la gente de Thoth y compartió este conocimiento con ellos, diciéndoles que hagan con ellos lo que quieran. Cuando Thoth supo esto, echó a Hecate y la maldijo, pero ya era demasiado tarde. Las personas que vinieron a aprender en el templo de Thoth eventualmente cometieron atrocidades corruptas como quemar a los niños vivos dentro de los ídolos a Neb-Ogeroth, la Diosa Negra. Ellos envenenaron la tierra y el aire, y trajeron terremotos, hambre y plagas. La estatua que estaba en Gorinium que contenía la Mano Derecha de Anum vio las atrocidades de esta gente. Lloró por ver lo que la gente de Thoth había hecho. La estatua se llenó de una rabia terrible y mató a la gente de Gorinium, la sangre de las personas que morían pintaron de rojo la estatua. Después de matar a todos en Gorinium, se arrojó desde las murallas de la ciudad y fue destruido. La única pieza que quedaba era la Mano Derecha.

Aunque Gorinium fue destruido, muchas de las otras ciudades permanecieron. Thadrethes, Leto, Hypos, Urrasan y la Atlantida aún estaban poblados, lo que permitió que el imperio se quedara. Los hiperbóreos se dividieron en dos grupos: La Gente de la Mano Derecha aún mantenía la enseñanza de Thoth y adoraba a la Mano Derecha y la Gente de la Mano Izquierda que adoraba a la Diosa Negra. Para entonces, los espíritus de los Ogdru Hem estaban comenzando a regresar al mundo y, a pesar de su poder anterior, los hiperbóreos no podían detenerlos para siempre. Algunos sacerdotes hiperbóreos se encargaron de asegurar que la segunda raza del hombre, la humanidad, tuviera una oportunidad contra los Ogdru Hem. Enseñaron a unos pocos muy selectos cómo convocar y utilizar el poder del Vril. Poco después, la Gente de la Mano Derecha usó su poder para abandonar el mundo. La Gente de la Mano Izquierda eligió descender al mundo interior. Crearon una raza de esclavos, los Sirvientes de la Mano Izquierda, para construir y mantener grandes máquinas de guerra. Esperaban algún día regresar al mundo de la superficie y recuperar su antiguo poder. Sin embargo, sus esclavos se rebelaron contra la Gente de la Mano Izquierda y los mataron a todos.

Segun lo escrito en The True Secret History of The World escrito por la medium británica Amelia Dunn, presuntamente en estado de posesión, entre los años 1911-1913, la causa del enfriamiento del globo, y la destrucción de Hiperbórea, sucedieron al mismo tiempo. En otros capítulos del libro Heca-Emem-Ra es identificada con la diosa griega Hécate.

La civilización hiperbórea desapareció dejando pocos restos materiales y escasa influencia en otras culturas. Se dice que algunos descendientes remotos sobrevivieron en Groenlandia al menos hasta el Siglo XI, cuando entrarían en contacto con los esquimales y los vikingos. También es posible que un grupo muy pequeño de sacerdotes huyeran hacia el sur conservando parte de su antiguo conocimiento y dando inicio a diversas ordenes y hermandades secretas en diversos puntos del globo.

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